El arma más poderosa para un mundo más humano
La cooperación se eleva como la herramienta, según mi perspectiva, más poderosa para que se dé esa transformación social que muchos demandamos a gritos. Queremos y estamos convencidos que necesitamos vivir en un mundo más sensible a las necesidades del otro, a las necesidades de todos. Es totalmente posible si asumimos que desde nuestra realidad podemos hacer cosas, pequeñas o grandes, pero siempre se puede hacer algo. Además, no estamos solos.
Hay mucha gente esperando que salga algún valiente que quiera mover el árbol para empezar a ayudarlo. Todos somos necesarios, tanto los que tienen la iniciativa como los que siguen al de la iniciativa; igualmente, estos roles se van rotando. En algunas ocasiones, somos los que se lanzan de primeros a empujar y en otras, somos los que ayudan a esos primeros en lanzarse a mover ese gran árbol.
La iniciativa hace despertar las mentes conformistas. La desidia queda minimizada y mermada. Si queremos que se abra el camino para todos, el camino es que todos cooperemos. No hay éxito sin esfuerzo, no hay logros humanizantes sin la presencia de otros seres humanos.